La leche frita es un postre tradicional, típico de Semana Santa, es un dulce perfecto para cualquier ocasión, ligero y cremoso, además, he adaptado la receta para que sea más ligero y apto para alérgicos, libre de lactosa, sin gluten, bajo en azúcar y sin huevo.
700 ml leche vegetal (yo usé leche de arroz)
120 gr harina de arroz
50 gr. stevia en polvo
3 cucharadas de harina de garbanzo
Ralladura de un limón
1 palo de canela
aceite para freír
1. En un cazo ponemos la leche, la stevia, la canela y la ralladura de limón, cuando empieza a hervir, retiramos del fuego.
2. Mezclamos las dos harinas, echamos un poco la leche caliente anterior, y mezclamos para disolver las harina, añadimos el resto de la leche, y volvemos a poner en el fuego durante 5 minutos, sin dejar de remover, para que nos se pegue la crema. Retiramos el palo de canela, y dejamos enfría en una fuente.
3. Por último, cortamos en trozos, que rebozaremos con harina de arroz primero y luego con harina de garbanzo, una vez rebozados, freímos en abundante aceite.
Os aconsejo utilizar stevia natural en polvo, que encontraréis en herboristerías. No intentéis utilizar otro edulcorante, como sacarina, o stevia falsa, porque no os quedará bien, podéis sustituir la stevia, por panela o azúcar moreno no refinada, o incluso darle un toque más rústico, sustituyéndola por miel.
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