Me apasiona el queso ricota, es uno de mis preferidos a la hora de hacer un pastel de queso, aporta mucha suavidad a la textura , además de dar un sabor especial a queso. Como ya sabéis tengo una larga lista en el blog de recetas de cheesecake, pero cada una es diferente, aunque varían unos pocos ingredientes, además de la forma de horneado.
La receta de hoy es rápida y sencilla y con pocos ingredientes, así que no hay excusa para no prepararla, últimamente me he aficionado a las recetas rápida y ricas.
INGREDIENTES
300 gr. queso ricota
500 gr. nata
3 huevos
50 gr. avena fina
200 gr. galletas de avena
50 gr. aceite de coco
125 gr. azúcar de coco
1. Trituramos las galletas, y mezclamos con el aceite de coco disuelto previamente en el microondas. Formamos la base del molde, cubriendo este por completo, reservamos en el frigorífico mientras hacemos el relleno.
2. Batimos los huevos con el azúcar de coco hasta que doble su volumen, añadimos el queso, la nata y la avena, batimos para integrar todos los ingredientes en la crema.
3. Sacamos el molde, y echamos el relleno sobre la base de galletas, yo decoré con cuatro galletas de avena y pepitas de chocolate, horneamos a 180º durante 30 minutos.
4. Una vez fría, decoramos con frambuesas y mermelada de frambuesa.
El coco predomina en el sabor de la base del pastel, que combina perfectamente con el relleno de ricota, el resultado un delicioso sabor tropical, riquísima, por cierto, me ha encantado la idea de colocar galletas encima del relleno de queso, aporta una segunda capa deliciosa sin ser demasiado empalagosa o exagerada, la próxima vez, la cubriré por completo de galleta.
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